TENENCIA

Estas canas son mías – se dijo –
este ceño fruncido y esta sonrisa irónica
y este rengueo sistemático
cada comienzo de julio, cuando el invierno
me estalla en los huesos
y me arrincona.

Esta experiencia es mía – se dijo,
y se sacudió a lo perro mojado los años –
el camino sigue hasta donde llegue, pero sigue
mientras dure el aire
mientras haya tiempo
mientras amanezca
mientras tantas cosas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

me encantó tenencia, lo podria haber encontrado en cualquier blog y hubiese dicho...que bello lo que escribió Marta, mis reverencias señora maestra

Anónimo dijo...

nada de anónimo soy Graciela,no puedo entrar